Celo en las gatas: Cuánto dura el celo, cuáles son sus fases y cuidados
El celo en las gatas genera numerosas dudas y curiosidades. Afecta a la gata y a su entorno. Por eso, en este artículo, te explicaremos los puntos clave del celo. Te mostraremos cómo identificar las fases, comprender el ciclo y ofreceremos consejos para cuidar a tu gata en esta etapa.
¿Qué fases comprenden el ciclo reproductivo de una gata?
El ciclo reproductivo de las gatas se compone de distintas etapas, cada una con características propias. Entender estas fases es crucial para saber en qué etapa se encuentra tu gata y cómo puedes apoyarla adecuadamente.
- Proestro: Tiene una duración de 1 a 3 días. Durante esta fase, tu gata puede ser más afectuosa o irritable. Empezará a buscar un compañero y aumentará sus maullidos para atraerlo. Es posible que marque territorio con orina pero todavía no está lista para aparearse. Los folículos ováricos se desarrollan y los niveles de estrógenos aumentan, provocando cambios en su comportamiento.
- Estro o celo: Si no hay un macho cerca, este período puede durar de 10 a 14 días y el tiempo entre dos celos consecutivos es de 2 a 3 semanas. Si hay un macho presente, el estro dura entre 4 y 7 días, siendo especialmente receptiva en el medio de esta fase. Durante unos 6 días, notarás que maúlla casi constantemente, señal de que está lista para aceptar al macho.
- Metaestro: Dura entre 8 y 15 días. Es un período de inactividad sexual que sucede entre un celo y otro. Si tu gata se ha apareado y ovulado pero no se ha quedado embarazada, entrará en una fase de diestro, que puede durar unos 45 días.
- Anestro: Dura entre 60 y 120 días. En este tiempo no hay actividad sexual y se da entre las temporadas reproductivas.
Comprender el ciclo reproductivo de las gatas es fundamental. Sin embargo, para un cuidado adecuado y consejo experto, es esencial consultar al veterinario. Este profesional te guiará sobre la salud reproductiva de tu gata y cómo manejar su comportamiento durante el celo, adaptándose a sus necesidades específicas.
¿Qué hace única la ovulación en las gatas?
En las gatas, la ovulación no se produce a intervalos fijos como resultado de un ciclo hormonal, como ocurre en muchas otras especies. En cambio, la liberación de óvulos por parte de los ovarios se inicia directamente por el acto físico del apareamiento. Esto hace que la ovulación generalmente tenga lugar entre 24 y 48 horas después del apareamiento.
Además, la ovulación puede ser inducida no solo por la cópula, sino también por estímulos táctiles específicos en la región lumbar. Esto puede suceder durante el juego o las interacciones con otros gatos o incluso con los propietarios.
¿Cuándo experimentan las gatas su primer celo?
Si te preguntas cuándo comienza el primer celo de las gatas, es importante saber que este evento ocurre al llegar a la pubertad, generalmente entre los 6 y 9 meses de edad.
El principal factor que determina el inicio del celo en las gatas es su entorno y la exposición a la luz.
Las gatas que viven en la calle suelen entrar en celo desde finales de invierno hasta principios de verano, debido a que los días se alargan.
Por otro lado, las gatas que viven en interiores y están expuestas a luz artificial constantemente pueden entrar en celo en cualquier momento del año.
¿Cuánto tiempo dura el celo en las gatas?
El celo de las gatas generalmente tiene una duración de aproximadamente 6 a 7 días y puede ocurrir cada 10 a 15 días. Si un macho cubre a tu gata, notarás que el celo cesa en aproximadamente 24 a 48 horas.
Es importante recordar que las gatas son poliéstricas estacionales, lo que significa que experimentan varios ciclos de celo consecutivos durante su temporada reproductiva, la cual dura entre 6 y 7 meses.
¿Con qué frecuencia entran en celo las gatas?
Una gata puede tener períodos de celo continuos durante seis o siete meses. Por lo tanto, puede entrar en celo cada 10 a 15 días.
¿Hasta qué edad las gatas experimentan el celo?
Las gatas pueden tener celos a lo largo de toda su vida reproductiva, que prácticamente abarca toda su existencia. A diferencia de los seres humanos, las gatas no experimentan un periodo como la menopausia que detenga completamente su ciclo reproductivo.
Esto implica que las gatas mayores aún son capaces de entrar en celo y concebir. Sin embargo, es relevante destacar que tanto la frecuencia como la intensidad del celo pueden disminuir con la edad. Además, los embarazos en gatas mayores pueden presentar mayores riesgos para la salud tanto de la madre como de los gatitos.
Por estos motivos, y para prevenir camadas no deseadas y posibles problemas de salud relacionados con el celo y el embarazo en gatas de edad avanzada, muchos veterinarios aconsejan la esterilización.
¿Cómo se comporta una gata en celo?
El celo en las gatas marca una fase significativa en su ciclo reproductivo, con cambios y señales específicas tanto para ellas como para quienes conviven con estos encantadores animales. Esta fase se reconoce fácilmente por diversos comportamientos y síntomas característicos.
Consejos para cuidar a tu gata durante el celo
Durante estos días, tu fiel compañera puede sentirse más estresada e inquieta. Aquí te dejamos algunas recomendaciones para aliviar su malestar:
- Mantén el arenero limpio: Las gatas en celo cuidan mucho su higiene y son sensibles al estado de su arenero. Límpialo con frecuencia para fomentar su uso y mantener su entorno limpio.
- Aumenta las sesiones de cepillado y caricias: Dedicarle más atención puede calmarla. El cepillado elimina el pelo muerto y es una forma de consentirla.
- Utiliza feromonas sintéticas como Feliway: Estos productos imitan las feromonas faciales de los gatos y tienen un efecto tranquilizador. Son muy útiles para reducir el estrés y la ansiedad durante el celo.
- Ofrece un espacio tranquilo y seguro: Asegúrate de que tu gata tenga un lugar tranquilo donde pueda retirarse. Durante el celo, puede preferir la soledad o un sitio seguro para descansar sin interrupciones.
- Controla su dieta y asegura acceso constante a agua fresca.
- Reduce los estímulos externos: Minimiza los cambios en el ambiente y los ruidos fuertes que podrían aumentar su estrés.
- Evita el acceso al exterior: Las gatas en celo pueden tratar de escapar para encontrar pareja. Evitando que salga reduces el riesgo de embarazos no deseados y accidentes. Consulta nuestro post: ¿Los gatos saben volver a casa?.
Recuerda que cada gata es única y lo que ayuda a una puede no ser efectivo para otra. Observa a tu mascota y adapta estos consejos a sus necesidades para que atraviese el celo lo más cómodamente posible.
Además, es importante desmentir mitos como que “las gatas necesitan tener una camada antes de ser esterilizadas”. Esto carece de base científica. La esterilización puede realizarse antes del primer celo sin impactar negativamente en la salud de la gata, previniendo embarazos no deseados y ciertos problemas de salud.